Bosques Azules

Figura 1. Manglar.

Manglares

Los manglares o bosques de mangle son humedales típicos de las zonas tropicales y subtropicales, considerados como uno de los ecosistemas más valiosos de nuestro planeta, debido a distintos servicios ecosistémicos que brindan a especies terrestres y acuáticas que encuentran refugio en estos sistemas; esto, gracias a que ofrecen un hábitat extenso y sumamente variado, apto para el desarrollo de individuos pertenecientes a los grupos de crustáceos, moluscos, peces, aves, reptiles, anfibios y mamíferos (Fundación Aquae, s.f.; FAO, 2016).

Figura 2. Ubicación de manglares en las zonas tropicales y subtropicales.

Estos ecosistemas se ubican en las zonas costeras, caracterizándose por presentar especies vegetales muy específicas y con adaptaciones fisiológicas que les permiten tolerar y sobrevivir a elevados niveles de salinidad o a bajas concentraciones de oxígeno en los sustratos en los que se encuentran las raíces. El árbol de mangle es la vegetación dominante en estos humedales, y cuentan con características muy peculiares que favorecen el intercambio gaseoso de la planta, por ejemplo, presentan raíces que se desarrollan en el medio aéreo, creciendo sobre el nivel del agua, y se introducen en los sustratos fangosos, además, cuentan con estructuras llamadas lenticelas que cubren por completo raíces y tallos, asegurando la entrada de oxígeno para realizar funciones esenciales. Asimismo, algunas especies de estos árboles, presentan glándulas en las hojas, especializadas para excretar el exceso de sal absorbido por las raíces  (Aguilar-Sandí, s.f.).

Figura 3. Raíces del árbol de mangle.

FUNCIONES DE LOS MANGLARES

Estos humedales favorecen la conectividad entre ecosistemas marinos y continentales, permitiendo una riqueza importante de especies que encuentran refugio y sitios perfectos para alimentación o reproducción, algunas de las especies de crustáceos, moluscos o peces representan una importancia económica para aquellas comunidades cercanas que explotan de manera sustentable los recursos que les provee este sistema. Los manglares también se han caracterizado por absorber el agua de las mareas y de las lluvias, recargando las aguas subterráneas y amortiguando el efecto de fenómenos naturales como fuertes oleajes, inundaciones, tormentas y huracanes; asimismo, por la estructura de sus raíces son capaces de retener distintos sedimentos, materia orgánica y contaminantes tóxicos, los cuales pueden provenir de los ríos que desembocan en estos sistemas, evitando que lleguen a los ecosistemas marinos y se alteren sus procesos ecológicos. Por otro lado, una de las funciones más importantes, y la razón por la que se conocen como bosques azules, es porque contribuyen significativamente con la captación y almacenamiento de carbono en sus sustratos, mitigando el efecto del cambio climático (Vargas-Fonseca, 2015; SINAC, 2018; UCR, 2018; Fundación Aquae, s.f.).

Figura 4. Especies que se pueden encontrar en los manglares. A) Espátula rosada,

B) Zarigüeya común, C) Caimán de anteojos, D) Pargo.

A pesar de las distintas funciones que cumplen los manglares, se conoce que estos han sido fuertemente impactados por las actividades antropogénicas como la utilización de pesticidas y plaguicidas en zonas agrícolas, presencia de productos de limpieza provenientes de áreas urbanas, drenajes para desviar de manera pasiva el flujo del agua, cambio en el uso de la tierra, entre otros; cada una de estas acciones ha provocado una reducción del 35% de estos humedales en todo el mundo (Vargas-Fonseca, 2015; UCR, 2018).

EN COSTA RICA

Figura 5. Manglares de Costa Rica

En los manglares del territorio costarricense existen siete especies de árboles de mangle: mangle rojo (Rhizophora mangle), mangle caballero (Rhizophora racemosa), mangle piñuela (Pelliciera rhizophorae), mangle mariquita (Laguncularia racemosa), mangle botoncillo (Conocarpus erectus), mangle salado (Avicennia germinans), cada una de estas especies cuenta con las adaptaciones fisiológicas para tolerar las características de las zonas intermareales (Aguilar-Sandí, s.f.).

Figura 6. Tipos de árbol de mangle. A) Mangle rojo, B) Mangle salado,

C) Mangle piñuela, D) Mangle mariquita.

En el Golfo de Nicoya, los manglares presentan variación en la composición de árboles de mangle, y cubren una extensión aproximada de 13 828 hectáreas; dentro de estos se ubica uno de los manglares más importantes del Pacífico Central de Costa Rica, que se extiende desde el Estero de Puntarenas hasta Chomes cubriendo una extensión de 2 500 hectáreas. Este ecosistema es uno de los principales sitios que representa la importancia económica y comercial de los humedales, ya que reúne alrededor de 2 500 pescadores artesanales y 800 recolectores de moluscos del país, hombres y mujeres que realizan estas actividades cada día, de manera sustentable, para obtener un ingreso económico (FAO, 2016; SINAC, 2018).

Al igual que la mayoría de manglares a nivel mundial, este ha estado sujeto a drásticas transformaciones e impactos humanos, durante los años 60 el manglar contaba con una extensa franja de 4 Km cubierta en su totalidad por árboles de mangle, sin embargo, en la actualidad cuenta con franjas de 200 a 500 m, esto como consecuencia directa del aumento en la intensidad de actividades agropecuarias como el cultivo de caña de azúcar, piña, producción de camarón, crecimiento de la población y extensión de la urbanización, las cuales aumentan la concentración de sustancias tóxicas y coliformes fecales en los cuerpos de agua que desembocan en estos ecosistemas, además, existe sobreexplotación de los recursos marinos, y otras actividades que intervienen en los procesos ecológicos e hidrológicos de estos humedales. Esta reducción en la cobertura de manglar, disminuye sus capacidades productivas, afectando directamente a la biodiversidad y a la economía de las comunidades cercanas (SINAC, 2018).

Figura 7. Daños por acciones antropogénicas, A) cultivo de caña,

B) cultivo de plátano, C) sedimentación.

A pesar de las devastadoras consecuencias de las actividades humanas en los manglares de todo el país, muchas comunidades costeras se han propuesto trabajar para proteger y conservar estos ecosistemas, trabajando en conjunto o creando organizaciones como la Asociación de Pescadores y Piangüeros del Golfo Dulce (ASOPEZ), que tienen como objetivo realizar campañas de reforestación, buscando el mantenimiento y protección de estas zonas a largo plazo, por ejemplo, solo en 3 meses del año 2014, las comunidades de La Islita lograron sembrar 5 700 semillas de árbol de mangle en 1.2 hectáreas en el manglar del Estero de Puntarenas (FAO, 2016; UCR, 2018).

A continuación, se presentan dos videos, que demuestran que si se pueden reunir esfuerzos entre las comunidades para lograr conservar y preservar estos ecosistemas.

Video 1. Restauración de Manglar en Nicoya, Costa Rica.

Video 2. Healthier Mangroves, Richer Communities.

Bibliografía

Aguilar-Sandí, D. (s.f.). Manglares y mangles de Costa Rica. https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/rbt/article/view/36385/37043

FAO. (2016). Situación de los pobladores de la Islita Puntarenas. http://www.fao.org/3/i5681s/i5681s.pdf

Fundación Aquae. (s.f.). Los manglares y su importancia. https://www.fundacionaquae.org/los-manglares-que-son-tipos-importancia/

SINAC. (2018). Plan General de Manejo del Humedal Estero Puntarenas y Manglares Asociados. http://www.sinac.go.cr/ES/planmanejo/Plan%20Manejo%20ACOPAC/Humedal%20Estero%20Puntarenas%20y%20Manglares%20Asociados%20(2018).pdf

UCR. (2018). Manglares: escudos naturales en riesgo. https://www.ucr.ac.cr/noticias/2018/06/08/manglares-escudos-naturales-en-riesgo.html

Vargas-Fonseca, E. (2015). Capacidad de regeneración natural del bosque de manglar del Estero Tortuga, Osa, Puntarenas, Costa Rica. Revista de Biología Tropical, 63(1). doi:10.15517/rbt.v63i1..23104

Figura 1. Anónimo. (s.f.). Manglar [Figura]. https://es.lascascadasthefalls.com/damasislandmangrovetour

Figura 2. Anónimo. (s.f.). Ubicación de los manglares en las tropicales y subtropicales [Mapa]. https://ecosistemas.ovacen.com/bioma/manglar/

Figura 3. Anónimo. (s.f.). Raíces del árbol de mangle [Figura]. Recuperado de https://blogs.elespectador.com/medio-ambiente/mongabay-latam/futuro-las-recolectoras-colombianas-moluscos-depende-del-manglar

Figura 4A. Anónimo. (s.f.). Espátula rosada [Figura]. https://www.wikiwand.com/es/Platalea_ajaja

Figura 4B. Anónimo. (s.f.). Zarigüeya común [Figura]. https://co.pinterest.com/pin/544865254895897370/

Figura 4C. Anónimo. (s.f.). Caimán de anteojos [Figura]. https://www.quo.es/naturaleza/a10809/recuperacion-entornos-naturales/

Figura 4D. Anónimo. (s.f.). Pargo [Figura]. http://gulfprogram.ucsd.edu/blog/climate-change/el-valor-de-los-manglares/

Figura 5. Anónimo. (s.f.). Manglares de Costa Rica [Mapa]. https://ecosistemasdecostarica.blogspot.com/2011/07/manglar.html

Figura 6A. Anónimo. (s.f.). Mangle rojo [Figura]. https://www.pinterest.com/pin/746964288186645936/

Figura 6B. Anónimo. (s.f.). Mangle salado [Figura]. https://www.pinterest.com/pin/618470961297876610/

Figura 6C. Hawkins, N. (2017). Mangle piñuela [Figura]. https://www.alamy.es/imagenes/tea-mangrove-pelliciera-rhizophorae.html

Figura 6D. Leslie, S. (2015). Mangle mariquita [Figura]. https://www.alamy.com/stock-photo-white-mangrove-laguncularia-racemosa-everglades-national-park-florida-125537763.html

Figura 7A. Torres, D. (s.f.). Tierras invadidas por cultivo de caña [Figura]. https://www.tierrapura.com/puntarenas-project-es

Figura 7B. Torres, D. (s.f.). Tierras invadidas por cultivo de plátano [Figura]. https://www.tierrapura.com/puntarenas-project-es

Figura 7C. Torres, D. (s.f.). Sedimentación en uno de los ríos [Figura]. https://www.tierrapura.com/puntarenas-project-es

Video 1. Conservación Internacional de Costa Rica (Productor). (2018). Restauración de Manglar en Nicoya, Costa Rica. https://www.youtube.com/watch?v=ETqghWzH_vg

Video 2. Osa Conservation (Productor). (2020). Healthier Mangroves, Richer Communities. https://www.youtube.com/watch?v=s0g6jmaNOus&t=13s